Para esta entrega repetí las decisiones de la vez pasada, teniendo en cuenta de alejar más la luz de la pared para que no se notara su textura.
En una primea instancia intenté replicar la misma foto que entregué la semana pasada, pero no encontré un encuadre en donde no se viera tanto piso y haya más aire a los costados del barco. Seguí probando distintos ángulos de cámara en vertical y moviendo el barco, pero ninguna me convenció lo suficiente. También seguí probando con el efecto blanco y negro.
Como las fotos verticales no me terminaban de convencer, decidí volver a lo horizontal. En las primeras fotos que saqué me pareció que había demasiado espacio libre en los costados del barco, por eso finalmente decidí moverlo un poco para que ese espacio no se notara tanto.
No tengo mucho espacio en mi casa, así que puse el barco más o menos en la mitad del living entre la pared y la puerta, y saqué la foto desde la cocina.
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