Me tocó esta fotografía de Rineke Dijkstra, una fotógrafa que me inspiró mucho cuando pensaba cómo retratar a mi hermana. Esta foto forma parte de una serie llamada Beach Portraits, en la cual retrata a jóvenes en la playa. Esta es una de las series más conocidas de Rineke. No sé la fecha exacta de las fotografías pero deduciría que por el tipo de bikini de la chica es de los 90s o tal vez de los principios de los 2000.
Por haber investigado a la fotógrafa anteriormente, sé que utiliza una cámara de formato medio en trípode. Si no hubiera sabido esto, creo que hubiera deducido que es una cámara analógica por la textura de la imagen que me recuerda una foto "vieja". El lente probablemente sea uno normal, ya que no hay deformaciones en los costados para que sea un gran angular, ni tampoco hay una gran profundidad de campo como para que sea un teleobjetivo. Como las olas del fondo y el pelo de la chica están congelados, y como se está fotografiando a una persona, creo que la velocidad y la apertura son aproximadamente 1/100 y F5.6. La principal fuente de iluminación es la luz natural del sol, pero por el brillo en la piel de la chica creo que Rineke también usó un flash. Me imagino la puesta algo así:
Rineke Dijkstra se caracteriza por tomar retratos a jóvenes, generalmente adolescentes o pre-adolescentes. Algo que noté en toda su obra es la mirada y actitud del sujeto retratado. Como en esta fotografía, hay una intimidad, profundidad e incluso diría vulnerabilidad en la mirada de la chica que me resulta muy atrapante. Asimismo, en todas las series de Rineke los retratados tienen una postura entre relajada e incómoda, o ambas a la vez, que me parece muy característica de la adolescencia, de un período de cambios, miedos e inseguridades.
Si sólo viera esta fotografía creo que me parecería una imagen muy interesante por sí sola, pero creo que la obra de Rineke es mucho más valiosa cuando se ve en conjunto. Al conocer los diferentes retratos me fascina la capacidad de retratar lo "awkward" del ser adolescente sin que sea vergonzoso para el otro (o cringe). Sin embargo, este retrato en particular es uno de los que más me gustan de Rineke. La primera impresión que tuve de él es que me recordaba mucho a El nacimiento de Venus de Botticelli. La pose un poco incómoda de la chica, con su pelo volando por el viento me llevó allí. Además, el paisaje de fondo, casi decorativo, hace que la chica sea el centro de la imagen, casi convirtiéndola en un ícono, como Venus en el cuadro. Por otro lado, me gustan mucho los colores de la imagen. El color del cielo es de un azul celeste muy lindo, y me hace dudar de si la fotografía fue tomada durante el día en un día muy despejado o durante "la hora azul". El contraste del bikini naranja con ese azul me parece muy bonito. Además, la postura de la chica instantáneamente me remite a esa sensación al llegar a la adolescencia de ser consciente del yo, de darse cuenta del espacio que ocupa tu cuerpo en el espacio. Por último, hay algo también en los colores y en la postura de la retratada que le dan un toque surrealista a la fotografía, como de ensueño.
Comentarios
Publicar un comentario